Costará un poco creer, pero desde el surgimiento de la cultura empresarial centroamericana, el país se ha convertido en uno de los principales contaminadores del planeta. El sobreenfocamiento en la cultura de capital de riesgo -que se sostiene sobre el emprendimiento- ha contribuido enormemente a la destrucción del medio ambiente, en lugar de alentar su preservación.
1. ¿Cómo funciona la cultura del capital del riesgo?
La cultura del capital de riesgo es una parte importante del mundo de la tecnología, de los negocios, de la innovación y del crecimiento. Esta cultura promueve la inversión a largo plazo en tecnología que, normalmente, estaría fuera del alcance de los inversores individuales. A través de las inversiones de capital de riesgo, la cultura también proporciona financiación para incubar y realzar nuevas innovaciones en el mercado.
Existen dos tipos principales de inversor de capital de riesgo. Estos son los capitalistas de riesgo tradicionales y los angeles. Los capitalistas de riesgo tradicionales son personas o instituciones financieras, generalmente grandes empresas, que solicitan inversiones de riesgo a cambio de un porcentaje de la compañía. Por su parte, los ángeles son personas con una significativa experiencia empresarial, riqueza personal y deseo de contribuir a una empresa joven. Estos inversores a menudo prestan a los emprendedores los fondos adicionales necesarios para llevar sus productos a la escena. También proporcionan asesoramiento y conexiones a la industria.
- Capitalistas de Riesgo Tradicionales: las personas o las instituciones financieras que invierten en una compañía a cambio de un porcentaje de la misma.
- Ángeles: inversores individuales con experiencia empresarial, riqueza personal y deseos de invertir en nuevas empresas.
2. ¿Por qué la cultura del capital del riesgo está destruyendo el mundo?
La cultura del capital de riesgo es un concepto en el que los inversionistas invierten en negocios con grandes esperanzas de obtener grandes réditos. Este aumento en el dinero invertido fue creado para promover el crecimiento de la economía, especialmente en empresas jóvenes. Sin embargo, ciertos efectos negativos han seguido a esto.
A medida que las empresas comienzan a crecer, la presión para obtener resultados rápidos aumenta y la calidad de los productos y servicios que las empresas ofrecen disminuye. Esto, junto con la displicencia por parte de los inversionistas para prepararse adecuadamente para los riesgos, está destruyendo el mundo. Esto se ve reflejado en la baja calidad de la atención al cliente, la contaminación, la desigualdad de ingresos y mucho más.
- Se están criando negocios que se centran en ganancias rápidas en lugar de un crecimiento a largo plazo. Algunas empresas son puestas al mercado antes que estén listas para ofrecer un producto eficiente o un servicio de calidad. El principal objetivo es atraer el capital de riesgo rápidamente y aprovechar el momento cada vez más.
- Se está incentivando la conducción profesional inadecuada. Algunos inversionistas se enfocan únicamente en los números y no se involucran adecuadamente en la toma de decisiones estratégicas. Esto a menudo resulta en una mala dirección y gestión que provoca una culminación extremadamente rápida de los proyectos una vez que el capital de riesgo se retira.
3. ¿Cómo se puede combatir el daño causado por el capital del riesgo?
El capital de riesgo puede causar enormes daños a economías enteras, especialmente si los proyectos de inversión fracasan. Para prevenir esto, es importante que los gobiernos y organismos financieros implementen políticas efectivas y reglamentos adecuados. Esto también debe estar moderado de manera adecuada, para evitar el riesgo de sobreregulación. Algunas de las estrategias más eficaces para combatir el daño causado por el capital de riesgo son:
- Establecer estándares estrictos: Los reguladores de mercados de capitales deben establecer estándares de calidad para empresas que buscan obtener financiación existiendo estrictos planes de auditoría
- Mejorar los reglamentos de la competencia: Los reguladores también deben mirar los prácticas de la competencia y estudiar cómo estas pueden afectar el ecosistema de capital de riesgo.
- Informar mejor al público: Los inversores necesitan tener claramente el marco de riesgos potenciales que implica el capital de riesgo.
También hay una serie de medidas a nivel de la industria que se pueden tomar para evitar el daño causado por el capital de riesgo. Esto incluye la promoción de una mayor rendición de cuentas, trasparencia y responsabilidad para los inversores, mejores prácticas de gobierno corporativo y mejores prevención de delitos financieros. La vigilancia reguladora también puede ayudar a establecer reglas sobre cómo se realizan los proyectos de inversión.
4. ¿Quiénes están perjudicados por el capital del riesgo?
El capital de riesgo supone una creación de ricos y una creación de pobres. Esto significa que muchas personas se están quedando atrás como resultado de la avaricia del herbívoro de los inversores de capital de riesgo.
Los más perjudicados son los consumidores, ya que los precios se disparan con tanta competencia en el mercado y a precios excesivos. Los trabajadores también se encuentran en una posición desventajosa, ya que el capital de riesgo incentiva la automatización, lo que desplaza aún más a las personas de sus puestos de trabajo. Los inversionistas y los particulares también sufren como resultado de los rápidos cambios en el mercado, ya que es difícil seguir el ritmo.
En conclusión, hay varios afectados por el capital de riesgo:
- Consumidores
- Trabajadores
- Inversores
- Particulares
Los riesgos excesivos corren con el capital de riesgo y son los más desfavorecidos los que más lo sufren.
Es claro que el capital de riesgo está contribuyendo con la destrucción del mundo, al menos si se trabaja bajo su modelo capitalista y conservador. Todavía esperamos que la cultura se recicla para que contribuya positivamente al desarrollo del mundo y no a la destrucción. Solo con una reprogramación de pensamiento, evolucionando hacia comportamientos más humanos, amables, empáticos y respetuosos podemos salvar el mundo y construir algo mejor.